Roberto Fernández espera que el tiempo le alcance para llegar en buenas condiciones a la Selección nacional y a los partidos finales de Bolívar. El jugador cruceño fue sometido el pasado fin de semana a una intervención quirúrgica por una fractura en la mano derecha y los médicos hablaron de al menos cuatro semanas antes de volver a la práctica activa.

“Yo soy positivo en ese aspecto y creo que voy a llegar, he hablado con unas personas del cuerpo técnico y me preguntaron cómo estoy, pero hay que esperar cómo evoluciona la mano”, explicó.

La Verde se concentrará a partir del próximo 14 de noviembre para el amistoso que tiene el sábado 19 frente al seleccionado de Perú, en Santa Cruz de la Sierra

Fernández se presentó ayer en la práctica de los celestes con un yeso en la mano derecha y contó que “no me han dado un tiempo estimado para poder volver a entrenar, todo dependerá de cómo evolucione la mano y cómo se adapte a los tornillos que me han puesto”, dijo Fernández.

El futbolista se perderá al menos cuatro semanas de la práctica activa, pero él lucha para recuperarse antes: “Todo va bien, tengo muy poco dolor y desde el lunes seguramente estaré más tranquilo, tengo que tomarlo por el lado bueno”.

Contó que había la posibilidad de jugar el resto del certamen con la mano vendada o con un protector, pero que se optó por la intervención para corregir la fractura. “Con el torneo paralizado, tomé la decisión acertada y me da margen para recuperarme”, dijo.