24/02/2016 | PASION FUTBOL

Todavía reluciente por el nacimiento de su primer hijo, el que fue su gol más importante, Juanmi disfruta de un presente por el cual luchó muchísimo.

Así de claro, conciso y contundente fue Juanmi Callejón, el mejor jugador del fútbol boliviano (por más que él no quiera reconocerlo) a la hora de comentar sobre las posibilidades de su Bolívar en la Libertadores 2016. Por eso su experimentada palabra vale, más aún si nos vamos dos años atrás, cuando fue la bandera de aquella "academia" semifinalista de la Libertadores: "Lo que pasó en esa semifinal, en la ida, fue un accidente deportivo, de llegar a esa instancia ahora, no nos volverá a pasar", recordó el español en referencia al serie con San Lorenzo.

Callejón es la fiel esencia de la evolución, jamás imaginó mientras se codeaba con los galácticos del Real Madrid, allá por 2007, que triunfaría en Sudamérica, y lo está haciendo. Tras varios años de buscar su lugar en el fútbol por equipos europeos, encontró en Bolívar su mejor versión, esa que lo llevó a marcar 25 goles la temporada pasada, y ganar tres títulos. Tal es así que la Selección Boliviana lo tiene en sus planes: "Llegado el caso me siento a conversar".

PASIÓN: ¿Jugarías en Bolivia?

CALLEJÓN: Sin ofender (risas), honestamente estoy un poco cansado del tema con la selección, todas las semanas surge alguna consulta en relación a ello. Por eso quiero aprovechar para ser claro, en primer lugar debo nacionalizarme, para eso debe llegar el mes de septiembre que es cuando se cumplen 3 años desde que vivo en Bolivia, tiempo que exige la ley. Para ello por supuesto que estoy abierto a una conversación con el entrenador del seleccionado, cosa que no que quiere decir que sí, tampoco que no.

PASIÓN: Se te ve muy bien, desde que llegaste a Bolívar (2013) tu juego evolucionó año tras año ¿esperabas ser goleador?

CALLEJÓN: Me encontré con una faceta de mi juego que debo decir me sorprendió, claro que siempre quise hacer muchos goles, pero creo que por mi posición y confianza, que fui adquiriendo todos estos años, llegar al gol fue algo que se vino dando solo; por supuesto que no es casualidad, hay que trabajar mucho para que las cosas salgan, y así ir ganando confianza.

PASIÓN: ¿Surge alguna broma con tu hermano (José María que juega en el Napoli) en relación que haces más goles que él?

CALLEJÓN: (Se ríe) Claro que no, él se pone muy contento por mí y hablamos mucho, es un gran sostén para mí. Él además no siempre juega de delantero definido y es cierto que la liga italiana es más dura y fuerte; espero que este año se lleven el título, está muy ilusionado y en buen nivel. Tenemos una gran relación, nos ayudamos mucho.

PASIÓN: Siempre hablas de lo importante que es la familia, lo unidos que son pese a la distancia, tú en Bolivia, él en Italia, tus padres en España, ¿se juntan en algún momento del año?

CALLEJÓN: Intentamos siempre cuadrar el tiempo libre para pasarlo juntos, mis padres siempre tienen como anhelo que podamos pasar las navidades y fines de año juntos, es tal vez el único momento que tenemos para disfrutar en familia. Las próximas fiestas además serán especiales, ya con mi hijo. Somos una familia muy unida que estamos siempre pendientes. Se extraña.

PASIÓN: ¿A este Bolívar no le pasaría de llegar a semifinales de la Copa como en 2014, y perder por goleada el partido de ida?

CALLEJÓN: De los errores se aprende, aunque eso fue más un accidente deportivo. Estábamos listos para hacer historia, de hecho ya habíamos hecho dado que con ese sistema, Bolívar jamás había llegado a una semifinal. No podíamos creer haber perdido 5 a 0 en la ida, fue insólito, ese equipo no merecía ese final. El equipo cambió en nombres, no en esencia, logramos transmitir eso y por ello me animo a decir que esta vez, no nos pasará.

PASIÓN: ¿Qué sería una buena Copa Libertadores para Bolívar?

CALLEJÓN: Por la dificultad del grupo, que para mí es de los más difíciles, el objetivo es clasificar a Octavos de final. Son tres grandísimos equipos, al igual que nosotros, y sabemos que nos hemos ganado un respeto importante su Sudamérica, más luego de la Copa en 2014. Para eso debemos ganar en casa y sacar algún punto fuera, podemos hacerlo.

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