03/12/2022 | lanacion.com.ar

En el fútbol, la superstición ocupa un lugar muy importante. Hay casi tantas cábalas como hinchas, y todo dato sirve para inclinar la balanza hacia el argumento que uno quiere sostener. En Brasil, por ejemplo, están preocupados por un dato que inquieta con respecto a la suerte de su selección en Qatar 2022. La derrota de ayer ante Camerún, por 1 a 0, hizo saltar una estadística irrefutable que quienes les prestan atención a estas cuestiones no pudieron soslayar. El traspié del conjunto que dirige Tité, que igualmente finalizó primero en el Grupo G y se cruzará en octavos de final con Corea del Sur, llevó a revisar los archivos de los mundiales.

La conclusión es que en ninguna de las cinco veces en las que Brasil fue campeón del mundo perdió un partido (obviamente se habla de fase de grupos, ya que en playoffs una derrota elimina automáticamente). Nunca hubo una mancha en las ocasiones en las que le tocó levantar la copa. Y eso, para los supersticiosos, es un dato inquietante a estas alturas. Repasemos:

    En Suecia 1958, en la fase de grupos, Brasil venció a Austria (3-0), empató con Inglaterra (0-0) y le ganó a Unión Soviética (2-0).
    En Chile 1962, no hubo derrotas en un grupo en el que superó a México (2-0) y España (2-1), e igualó con Checoslovaquia (0-0).
    En México 1970, obtuvo el ciento por ciento de los puntos en su grupo tras vencer a Checoslovaquia (4-1), Inglaterra (1-0) y Rumania (3-2).
    En Estados Unidos 1994, ganó dos encuentros (2-0 a Rusia y 3-0 a Camerún) y empató 1 a 1 con Suecia.
    En Corea/Japón 2002, volvió a tener eficacia total, tras ganarles a Turquía (2-1), China (4-0) y Costa Rica (5-2).

El dato que contrarresta

Eso sí, los supersticiosos brasileños pueden estar tranquilos porque también tienen un argumento para pensar que esta puede ser la ocasión para que Brasil conquiste su sexta Copa del Mundo. Y es que cada vez que ocurrió que ningún seleccionado ganó los tres partidos de la fase de grupos... ¡el campeón terminó siendo el Scratch! Ocurrió anteriormente en 1958, 1962 y 1994, tres mundiales que conquistó la verdeamarelha.

¿A cuál de los dos datos les prestarán más atención? Por ahora, los brasileños miran en el corto plazo a Corea del Sur, su rival para octavos de final, a quien enfrentarán el próximo lunes.
LA NACION

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