12/12/2022 | as.com

El final de Cristiano en el Mundial -y quién sabe si en la selección portuguesa- refleja la situación tan convulsa que ha vivido el futbolista últimamente. Señalado, sin equipo, suplente con su selección, lejos de la mejor forma física, la manera en la que afrontó su quinto Mundial no fue la mejor posible. Varios puntos han jugado en su contra. Son estos:

Adiós al United

En pleno torneo se supo que no continúa en el Manchester United. El anuncio por parte del club inglés de que rescindía el contrato con Cristiano cogió a todos por sorpresa en la concentración lusa en Doha. Nadie podía imaginar que en medio de un Mundial se anunciara una decisión tan relevante para una de las grandes estrellas del torneo. Quizá se pudo haber esperado al final.

Futuro incierto

Con la noticia de su salida del United confirmada, enseguida comenzaron las especulaciones sobre dónde jugará. Desde Arabia Saudí se filtró un posible acuerdo con Al Nassr, conjunto de la primera división saudí, que estaría dispuesto a pagarle 200 millones de euros. También cayó en la concentración portuguesa como una bomba antes de jugar ante Suiza en octavos. Luego él lo desmintió.

Centro de todo

La única vez que Cristiano compareció ante los medios en Qatar fue para reprocharles que se centraran tanto en él y tan poco en el resto de los jugadores. “Preguntadles por ellos, no por mí”, dijo. Para entonces ya había saltado la noticia sobre su adiós al United y era el tema más comentado. Es más, futbolistas como Bernardo Silva se habían quejado de que todo versara en torno a Cristiano.

Sustituciones

Incluso habiendo hecho historia (primer jugador en marcar en cinco Mundiales) tras su gol ante Ghana, Fernando Santos decidió sustituirlo tanto en ese partido como en los posteriores de la primera fase. No acabó ninguno, lo que denotaba que físicamente no estaba bien. Venía de ser suplente en el United y eso le pasaba factura. La sensación fue que no aguantaba 90 minutos.

Pique con Santos

El clima se comenzó a calentar en el duelo ante Corea del Sur. Al ser cambiado por Fernando Santos, el capitán se dirigió al banquillo y espetó unas palabras que luego las cámaras captaron: “Tienes una prisa de cojones por cambiarme, no me jodas”. El futbolista dijo luego que había sido un comentario a un jugador coreano, pero el técnico lo confirmó a los días: “No me gustó nada”.

Al banquillo

La gran decisión que revolucionó el Mundial fue la suplencia de Cristiano ante Suiza en octavos. Según publicó Récord, el futbolista no se lo tomó nada bien y tuvo una discusión airada tras la que amenazó incluso con irse. Después la federación y él negaron tal extremo, pero Fernando Santos sí habló de una conversación privada con él por su suplencia. “Somos amigo”, dijo. Su sustituto, Gonçalo Ramos, hizo tres goles.

El entorno

Después de ser suplente también ante Marruecos, en cuartos, y caer eliminados, el entorno de Cristiano sacó la artillería. “Hoy tu amigo y entrenador decidió mal”, escribió su mujer Georgina Rodríguez. “No se puede subestimar al mejor jugador del mundo”. La hermana del jugador, Katia Aveiro, también fue en esa línea: “Mi hermano nunca se rindió ni cuando cavaron su tumba...”.

Y ahora qué

Tras el adiós de Portugal del Mundial se habla tanto o más de dónde jugará Cristiano y de si seguirá en la selección que de la propia eliminación en sí, dolorosa, ante Marruecos. Cristiano cumple 38 años en febrero y se ve muy mermado en todos los sentidos como para continuar en la selección. Llegaría con 39 años a la Eurocopa y con 41 al Mundial. El futuro está en sus manos... o no.

“El sueño”

Cristiano Ronaldo se marchó del terreno de juego entre lágrimas tras confirmarse la eliminación de Portugal en el Mundial de Qatar 2022. No hubo declaraciones de CR7 tras el partido. Y es que el astro portugués se ha pronunciado por primera vez al respecto a través de una publicación en su cuenta personal de Instagram:

“Ganar un Mundial con Portugal era el sueño más grande y ambicioso de mi carrera. Afortunadamente gané muchos títulos de dimensión internacional, incluso para Portugal, pero colocar el nombre de nuestro país en lo más alto del mundo era mi mayor sueño. Luché por ello. Luché mucho por ese sueño. En las 5 veces que participé en Mundiales a lo largo de 16 años, siempre al lado de grandes jugadores y apoyado por millones de portugueses, lo di todo. Lo di todo en el campo. Nunca le di la espalda a la lucha y nunca renuncié a ese sueño. Por desgracia, ayer se acabó el sueño. No tiene sentido reaccionar en caliente. Sólo quiero que todos sepan que se dijo mucho, se escribió mucho, se especuló mucho, pero mi dedicación a Portugal no cambió ni un instante. Siempre fui uno más para luchar por el objetivo de todos y nunca daría la espalda a mis compañeros y a mi país. Por ahora, no hay mucho más que decir. Gracias, Portugal. Gracias, Qatar. El sueño fue bonito mientras duró... Ahora, esperemos que el tiempo sea un buen consejero y permita que cada uno saque sus propias conclusiones”.

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